¿Cuánto cuesta crear una empresa? 

Lo primero te lo podemos avanzar: esfuerzo y dedicación. Lo segundo, también: dinero. Todo cuesta dinero en esta vida, y más cuando se trata de emprender en España. Independientemente del tipo de sociedad mercantil que escojas cuando vayas a constituir tu empresa, hay una serie de factores que pueden hacer que necesites más o menos money: la localización, el sector en el que vas a trabajar o la cantidad de trabajadores que necesites… todo esto hará que dar el salto empresarial sea más caro o más barato. 

Ahora bien, hay gastos asociados a la creación de la sociedad que son ineludibles. Nos vamos a centrar en todos ellos, una forma de prevenir sustos más tarde. Saca la calculadora, que vamos a hacer cuentas. 

Capital inicial según el tipo de sociedad mercantil

Para gustos, colores; y para empresas, tipos de sociedades mercantiles. Las hay de todas las clases y con características muy distintas según la actividad profesional y la estructura de tu empresa: sociedades anónimas, limitadas, cooperativas, civiles…

Una de las sociedades mercantiles más comunes en España es la Sociedad Limitada. Hace unos años, las SL tenían el requisito de acumular un capital inicial de 3.000 €. Actualmente, esta cifra es simbólica, y tan solo es de 1 €. Eso lo tenemos todos a mano, así que empezamos con buen pie. 

¿Cuáles son los gastos de crear una empresa?

Los inicios son duros, y más cuando se trata de crear una empresa. Hay una serie de gastos que tendrás que afrontar solo por el mero hecho de emprender. ¿Te imaginas que te cobraran solo por nacer? Pues eso ocurre con las sociedades mercantiles. Aquí tienes el listado de los gastos por la creación de una empresa en España:

Costes legales y administrativos por crear una empresa

Por aquí tendrá que pasar todo el mudo. Estos gastos son los que tendrás que abonar al hacer casi cualquier trámite con la administración. Son gastos variables, ya que no son siempre los mismos; varían según diferentes factores, como la forma legal de tu empresa o la comunidad autónoma donde tengas el domicilio social. Los más comunes son estos cinco:

1. Por obtener la certificación negativa de tu marca 

Este es el primer paso para crear una empresa desde cero. Se trata de asegurar el nombre de tu empresa, al que se le asociará el CIF. Esto se hace a través del CIRCE de forma gratuita. Sin embargo, tener un documento acreditativo tiene un coste de 15€.

Una vez tengas luz verde con el nombre, puedes tramitar el registro en la misma página web, en el Registro Mercantil. No tendrás que pagar nada por este servicio.

2. Por tramitar la escritura pública de constitución

Cuando ya tienes la denominación social y los estatutos de tu empresa, toca tramitar la escritura pública, un proceso que se hace en el notario y, al igual que el anterior, es obligatorio para todas las empresas. Se trata de firmar un acta que refleje la voluntad de los socios de constituir la sociedad.

Después de algunas firmas recibirás la escritura de la constitución de tu sociedad. El coste de este trámite está alrededor de los 60 €.

3. Inscribir la empresa definitivamente en el Registro Mercantil

Ahora que tienes una empresa hecha y derecha, toca oficializarla en el Registro Mercantil. Lo tienes que hacer en la provincia donde se encuentre el domicilio fiscal de tu empresa. En esta página te muestran dónde están los distintos Registros Mercantiles en España. 

El precio de inscribir una empresa en el Registro Mercantil es de en torno a 60 €, dependiendo de provincia, y tienes un plazo de 2 meses desde que firmas la escritura pública ante el notario.

Costes asociados a la creación de una empresa

Ahora bien, no pienses que con esto ya puedes construir tu imperio. Todavía queda mucho recorrido. Existen un sinfín de gastos asociados a la creación de una empresa: de administración, por comprar activos o por invertir en publicidad para tu negocio. Te hacemos un listado con los gastos más comunes.

1. Por el alquiler o compra de una oficina o una tienda

Este es de los gastos más básicos. Es un coste fijo que tendrás que asumir si tu actividad requiere de un espacio físico donde desarrollar tu trabajo. Ya sea una oficina para trabajar, una tienda donde vender tus productos, un almacén donde guardar el stock o por el alquiler de un espacio de coworking. Además, del coste en mobiliario y equipo. Poco harás con un espacio vacío. La cosa se pone seria. 

2. Por hacer un plan de negocios

Bueno, pero esto no es tan difícil. No te fíes, tener un plan de negocios completo y definido no es barato. Si tienes los conocimientos necesarios es una aventura que puedes emprender tú solo, de lo contrario, tendrás que acudir a un consultor de negocios que haga su investigación previa y análisis de competidores para asegurarse de que lo que haces tiene sentido. 

3. Licencias y permisos

Es probable que, según el tipo de actividad que vayas a desarrollar en tu empresa, tengas que pedir licencias y permisos a las autoridades locales: por vender cierto tipo de productos, por manipular alimentos, para bares, restaurantes y cafeterías o por tener empleados a cargo… Estas licencias harán que el coste inicial que tienes que desembolsar pueda aumentar considerablemente. 

4. Por infraestructuras tecnológicas

Esto puede ser tan básico como pagar el wifi o tan complicado como contar con equipo técnico especializado para desarrollar tu actividad. Si te ha dado por montar un laboratorio, ten en cuenta que vas a dejarte mucho dinero en máquinas. Aunque no hace falta llegar tan lejos, ya que la mayoría de programas informáticos también son de pago. 

5. Por publicidad y marketing

Ponte que ya has hecho todo lo anterior. Tienes tu negocio en marcha, pero nadie sabe de él y nada de lo que has hecho ha generado frutos. ¿Cómo puedes evitar eso? Gracias al marketing y la publicidad. Dar a conocer qué haces es fundamental para llegar a tus clientes. Hay mil maneras de promocionarse: anuncios, redes sociales, colaboraciones… Tan solo busca qué canal será el mejor para tu empresa y explótalo al máximo. 

Recomendaciones de contabilidad para nuevos emprendedores

Desde TaxScouts, sabemos que no es fácil dar el paso y lanzarse al mundo empresarial. Es un salto a una piscina, y a veces es difícil saber si habrá agua o no. Por ello, aquí tienes un listado con algunas recomendaciones. Quizá todo esto ya lo sabías, pero nunca está de más recordar:

1. Lleva al día las finanzas de tu empresa. Ya has podido ver que hay mil y un gastos, por lo que llevarlos al día facilitará la gestión contable de la empresa y tomar decisiones según tus ingresos y pérdidas. ¡Esto es clave!
2. Ojito con los impuestos. ¿Sabes qué es el impuesto de sociedades? ¿Cada cuánto se paga? Ahora que te adentras en el mundo de la fiscalidad para empresas, tienes que saber de todo esto y mucho más para evitar problemas con Hacienda. 
3. Haz un estudio de mercado e investiga cuál es la situación del sector al que quieres entrar. Analiza a tus competidores y empápate de regulación fiscal para empresas (si estás aquí es que lo estás haciendo bien). Es decir, organiza un plan de negocios completo en el que volcar toda esta información. Cuando llegue el momento de la verdad, agradecerás saber dónde ir a buscar. 
4. Por último, déjate aconsejar, pero no de cualquiera. En TaxScouts somos expertos en asesoría para empresas, y ofrecemos asesoría fiscal y contable personalizada para empresas. Nos podemos encargar de todo: impuestos, libros, cuentas… para que todo esto te sea mucho más fácil.