¿Qué es la razón social de una empresa?

Para el emprendedor, su empresa es algo así como un hijo, y como tal, hay que elegirle un nombre. Lo más importante, dejando fuera gustos personales, es que sea representativo, diferente y, sobre todo, único. Coca-Cola no tendría tanto éxito de llamarse CuquiCaldo, por ejemplo (o sí, quién sabe). En este artículo te hablamos de la razón social, el nombre legal de la empresa. Quédate porque tiene muchas más implicaciones de las que puedas pensar. 

¿Qué es la razón social?

Igual que las personas tenemos nombre y apellidos que utilizamos para identificarnos legalmente, las empresas también tienen los suyos: la razón o denominación social. Ambos términos son los nombres y apellidos de las empresas, aunque tienen leves diferencias. ¿Cuáles?

Diferencias entre razón y denominación social

Pese a que en su gran mayoría estos términos se utilizan de forma indistinta, hay una leve diferencia que las distingue, la forma jurídica de la empresa en cuestión. 

La razón social se usa por todas aquellas empresas que adoptarán como nombre legal los nombres y apellidos de uno o varios de sus socios. Por tanto, la razón social se utiliza únicamente en sociedades colectivas o en sociedades comanditarias simples o por acciones. Al nombre se le debe incluir el indicador de tipo de sociedad:

• S.C. para la Sociedad Colectiva.
• S. en C.S para la Sociedad Comanditaria Simple.
• S. Com. por A para la Sociedad Comanditaria por Acciones.

Por otro lado, la denominación social es la que se refiere al resto de sociedades, que también deben incluir las siglas al final de su nombre. Estas varían según su forma jurídica. Aquí tienes el listado de todas las siglas:

• S.L. para la Sociedad Limitada.
• S.A. para la Sociedad Anónima.
• S.L.U. para la Sociedad Limitada Unipersonal.
• S.A.L. para la Sociedad Anónima Laboral.
• SLL. para la Sociedad Limitada Laboral.
• S.Coop. para la Sociedad Cooperativa.

Por lo tanto, la diferencia entre la razón social y la denominación social radicará, exclusivamente, en la forma jurídica de la empresa y la forma del nombre que podrá adoptar. 

¿Para qué se utiliza la razón social?

La razón o denominación social es el sello identificador de tu empresa. Se emplea tanto en usos administrativos y jurídicos como para asuntos económicos. Como acabamos de ver, no tiene por qué coincidir con el nombre comercial de la empresa, ya que las empresas suelen utilizar este segundo para denominarse e identificarse de cara al público. 

Aparte de utilizarse como nombre de registro en trámites burocráticos, la razón social también tiene que reflejarse en las facturas que emites como empresa. El simple hecho de omitir o no escribir correctamente la razón social en las facturas puede ser motivo para que la Agencia Tributaria las invalide. 

¿Cómo pedir la razón social de tu empresa?

Si ya has pasado la fase de darle vueltas y vueltas y, por fin, ya tienes la razón o denominación social de tu empresa, ahora toca inscribir el nombre en el Registro Mercantil. 

¿Cómo?, te preguntarás. Pues para ello, tendrás que seguir estos pasos:

1. Accede a la página oficial del Registro Mercantil Central.
2. En el apartado de Denominaciones Sociales, haz clic en Certificación de Denominación Social.
3. Aquí, te pedirán si es por constitución de una nueva sociedad o por cambio en la denominación, así como el beneficiario de la certificación, es decir, tú. 
4. En Denominaciones y forma social te van a pedir hasta cinco opciones para tu denominación social, en orden de preferencia.
5. En la última pantalla te pedirán tus datos personales y voilà, ya tienes tu razón social. 

Criterios para escoger la razón social de tu empresa

Ten en cuenta que, pese a que suelen ser bastante permisivos, hay unos criterios generales de certificación que el Registro Mercantil impone a la hora de escoger nombres:

• No puede contener abreviaturas. 
• No se permite usar siglas sin ton ni son.
• No se permite utilizar ningún dominio de Internet como nombre.
• No se pueden utilizar nombres de municipios, provincias o comunidades autónomas como elemento diferenciador de un nombre ya en uso. 
• No puede hacer referencia a una actividad diferente de su objeto social. Es decir, si vendes material escolar no podrás llamar a tu tienda Inmobiliaria Julián, por ejemplo. 
• En caso de utilizar el nombre parcial o completo de una persona, es necesario su consentimiento y autorización por escrito. 
• Por último, pero el más importante, no está permitido usar nombres idénticos a otros que ya existen y estén registrados. Esto también se aplica a palabras intercambiadas o similares.